La poesía siempre ha sido un refugio para las emociones más profundas. El amor, en todas sus formas, es una fuente inagotable de inspiración. A través de palabras sencillas o profundas, los versos pueden capturar la esencia y la belleza de este sentimiento universal. Aquí encontrarás poemas que evocan la pasión, la ternura y el deseo, reflejando la grandeza del amor en todas sus expresiones.
Algunos de estos poemas nacieron en momentos catárticos de mi vida, y son muy especiales porque capturan todo mi amor y dolor. Son poemas que conservare en este espacio tan especial porque reflejan momentos de cambio en mi vida. Sé que algunos de estos poemas han sido muy leídos, lo cual me llena de gratitud. Espero que disfrutes estos poemas, y quién sabe, tal vez te identifiques con ellos.
Todos estos poemas son de mi autoría.
Poemas de Amor
El amor, en todas sus formas, es una fuente inagotable de inspiración. Aquí algunos versos que capturan la belleza de este sentimiento.
- Mi Fuente Sagrada
He madurado tanto,
que en frascos he guardado
los sentimientos puros
que el amor me ha legado,
mi refugio sagrado.
Es un rincón de calma
donde el amor respira,
mi paz, mi melodía,
esa chispa encendida
que arde sin prisa.
Ni tú ni nadie podrá
alcanzar esa llama,
pues es mi alma misma,
mi más querida trama,
un rincón que no acaba.
Hoy decido protegerlo,
pues no importa si me toca
guardarlo hasta de ti,
con cada fuerza loca,
pues sé que lo destruirías
aunque sabes que es parte de ti,
así que prefiero cuidarlo
de tus manos, de tu orgullo.
Es mi fuente de vida,
mi chispa, mi esperanza,
y aunque algún día vengas
y reclames tu fragancia,
no dejaré que lo rompas,
porque en mi interior descansa.
No quiero ver ese frasco,
ese rincón tan puro,
en las manos de alguien
que es, tan inmaduro,
lo destruiría al tocarlo
y me destruiría a mí,
por eso prefiero alejarlo
de ti, de tu frenesí.
Allí se quedará,
sin grietas ni fisuras,
mi amor será mi escudo,
mi alma, mi armadura,
pues es el rincón sagrado
que recarga mi ternura.
- Ruego por un corazón libre de ti
En el altar de la despedida, mi ruego se posa, Que lastimes mis sentimientos. Con cada gesto que duela. Para que borre tu nombre y tu cara de mi mente.
Que el dolor sea la llave que cierre esta puerta, Que en la tormenta de lágrimas, mi alma se pierda. Ruego que lastimes, sin piedad, este corazón, Para que el olvido sea el bálsamo, la redención
Será como un eclipse, oscureciendo este amor. Que el eco de tus despedidas sea el adiós definitivo, En la danza de los adioses, un final concluyente.
Dolores agudos, como espinas en el jardín de mi ser, Que desgarren los recuerdos, que me hagan renacer. Prefiero la herida de un adiós, profundo y certero, A la sombra de un amor que ya no quiero.
Aunque duela al principio, en el dolor hallaré la calma, Un naufragio necesario para cerrar esta alma. Que las lágrimas despierten la aurora de un nuevo día, Donde mi corazón, libre de ti, vuelva a encontrar la armonía.
- Carta a un Amor Imposible
Querido Amor Imposible,
En medio del caos que nos rodea, siento la necesidad de expresar lo que guardo en lo más profundo de mi corazón. Aunque sé que nuestras circunstancias son complicadas y que el camino que se extiende entre nosotros está lleno de obstáculos, quiero que sepas que mi amor por ti permanece inquebrantable.
Es difícil enfrentar la realidad de que nuestro amor pueda parecer imposible en este momento. El mundo parece estar en constante agitación, y a veces siento que luchamos contra corrientes que intentan separarnos. Pero en medio de este caos, encuentro consuelo en los momentos de complicidad que han marcado nuestro camino.
Aunque pueda parecer que estamos atrapados en un laberinto sin salida, quiero creer que el destino nos ha unido por alguna razón. Nuestro amor puede ser desafiado por las circunstancias, pero sé en lo más profundo de mi ser que es real y significativo.
Te pido que tengamos paciencia y esperanza. Que sigamos luchando juntos contra viento y marea, manteniendo vivo el fuego que arde entre nosotros. No sé qué depara el futuro, pero prometo enfrentar cada desafío con valentía y amor. Creyendo en esa línea de tiempo que nos queda por vivir. Nuestros caminos se entrelacen algun día. Si ese día nunca llega estoy felíz de haberte conocido. Porque sentí lo que nunca habia sentido, una descarga de energia llena de paz y tranquilidad.
Con todo mi corazón, Me despido.
Elegías
- Ángel de Vida
un ángel que en la tierra me cuidó,
y sé que desde el cielo lo hace.
Mi alma murió cuando te fuistes
tatué tu partida en mi Alma,
sé que desde allá conociste
mis más profundos sentimientos.
Gracias por despedirte
y seguir cuidando de mí.
Gracias por encontrar la llave perdida;
esa llave que activó mi alma.
Gracias por hacer que mi pluma
volviera hacer magia.
Sé que haces lo imposible por
llenar mi vaso vacío;
ya no intentes, por favor
porque no quiero sufrir más.
Deja que mi vaso siga vacío,
porque cada vez que se llena y desborda;
el desastre es irreparable.
Me convierto en una niña armando
un rompecabezas imposible de armar.
Sentir otra vez duele,
duele tanto que quiero arrancarme la piel.
Había estado muerta por muchos años.
Había olvidado que era estar viva,
estar viva es sentir dolor.
Prefiero morir al inicio que al final;
porque el sufrimiento es más corto.
No me mandes a la guerra sin armas,
no se que voy hacer .
Estoy desesperada.
Hago tu voluntad y dejarte descansar en paz, o
hago mi voluntad y que no encuentres el descanso eterno.
Porque insistes si sabes que voy a sufrir.
No estoy preparada para esto, que voy hacer, ayudame;
es difícil no saber que hacer.
No puedo controlar este mar de emociones.
El tiempo ha sido mi mejor aliado.
Dejo al tiempo que me lleve por el camino correcto.
- Carta para un Ángel
Querido Ángel,
Hoy me siento compelido a escribirte desde la melancolía que se anida en mi corazón. Camino por la vida con la sombra de tus recuerdos, esos que se me ciernen como un manto protector en los días grises y solitarios. Has sido mi consuelo, mi guía en noches sin estrellas, y hoy, entre las líneas de esta carta, quiero expresarte el eco de mis pensamientos.
Recuerdo tus alas extendidas sobre mí, como un abrazo celestial que ahuyentaba mis miedos. Eras el faro en mis tormentas, la luz que iluminaba los pasajes oscuros de mi existencia. Ahora, en la extraña danza de la vida, me encuentro sola sin alguien que me haga sentir protegida.
Es curioso cómo la memoria teje el pasado, cómo las sonrisas se entrelazan con la protección que me brindabas. Pensé que cuando una alma partía, dejaba un rastro eterno en aquellos a quienes tocó, pero ahora veo que todo forma parte de los planes de Dios. Las almas se convierten en recuerdos, y los recuerdos, aunque inmortales, son a veces compañía solitaria de un amor que desapareció.
Te confesé, en susurros que se perdieron en el viento, que el amor no fue creado para mí. No deseo sumergirme en sus aguas inciertas ni sentir el ardor de sus llamas. Pero, querido Ángel, tú persistes en tus preguntas sobre mi andar en el amor. Es como si desde tu morada celestial quisieras recordarme que el corazón humano está diseñado para amar y ser amado.
Y aunque pueda parecer tonto, te repito que el amor, en su complejidad terrenal, no encuentra un lugar en mi existencia. Prefiero la paz de la soledad a la tormenta que el amor a veces desata. No quiero sentir, no quiero anhelar, y mi corazón se refugia en la calma de su propio silencio.
Sin embargo, Ángel, agradezco tu insistencia, tu preocupación desde más allá de las estrellas. Tu presencia, aunque ausente, sigue resonando en los susurros del viento y en las sombras que me cobijan. Que tu luz celestial guíe mis pasos en esta travesía llamada vida, aunque sea sin el calor efímero del amor humano.
Con gratitud y melancolía,
0 Comentarios
Deja tu Comentario